domingo, 16 de octubre de 2022

Bullet Train (2022)


Bullet Train, la película dirigida por David Leitch, ha sido la más ferroviaria de este pasado verano. El guion está basado en una novela del mismo nombre del escritor japonés Kōtarō Isaka, que fue publicada en 2010 y tuvo una versión teatral en 2018. Argumento: cinco asesinos a sueldo se encuentran a bordo de un tren bala que viaja de Tokio a Morioka con unas pocas paradas intermedias. Descubren que sus misiones no son ajenas entre sí. La pregunta es quién saldrá vivo del tren y qué les espera en la estación final (Filmaffinity).

La crítica ha sido muy dispar, desde la que la ha considerado una buena película de diversión hasta los que la han calificado de tediosa, pasando por los que la han asimilado a la estética de Marbel y los que han resaltado sus toques tarantinianos más o menos logrados. Agotadora, divertida, desmesurada, superficial y contraria a las leyes de la física son algunos de los calificativos que pueden leerse en las críticas.

Para el aficionado ferroviario, puede tener interés fijarse en los detalles constructivos del decorado que simula un tren bala japonés de última generación, rebuscar en las secuencias elementos técnicos del ferrocarril cuando éste empieza a despanzurrarse, mirar con ojos incrédulos a los personajes caminando por encima del convoy y llevarse las manos a la cabeza al contemplar la escena final del descarrilamiento.

He aquí algunos fotogramas:
 










Visto todo esto, si desean ver la mejor bullet train que se ha hecho, revisiten Shinkansen Daibakuha (1975, The Bullet Train, Pánico en el Tokio Express) de Junya Sato, que sigue siedo una obra maestra.