Los cuatro componentes de la cadena televisiva son un propietario que siempre está encerrado en su despacho con sus fetiches ferroviarios, un director y cámara, un editor y productor y un encargado de sonido. Todos cuatro están perdidamente locos por los trenes: los recorren, imitan sus sonidos con la boca, los filman a la que los ven y entrevistan a curiosos aficionados y aficionadas que están tan pillados como ellos.
El ferrocarril en la literatura, el cine y las artes plásticas. Por Jordi Font-Agustí.
miércoles, 1 de abril de 2020
Una serie ferroviaria japonesa muy muy friqui
Los cuatro componentes de la cadena televisiva son un propietario que siempre está encerrado en su despacho con sus fetiches ferroviarios, un director y cámara, un editor y productor y un encargado de sonido. Todos cuatro están perdidamente locos por los trenes: los recorren, imitan sus sonidos con la boca, los filman a la que los ven y entrevistan a curiosos aficionados y aficionadas que están tan pillados como ellos.