miércoles, 16 de mayo de 2018

Vida y amor en el metro de Nueva York


En 1946 un Stanley Kubrick de 17 años, que empezaba a trabajar en la revista Look como fotógrafo, recibió el encargo de hacer un reportaje sobre los viajeros del metro de Nuevo York. Lo tituló Life and Love on the New York City Subway (Vida y amor en el metro de Nueva York)

La serie de fotografías puede verse a pleno tamaño en el Museum of the City of New York.  En sus publicaciones se relata que Kubrick estuvo dos semanas deambulando por la red del metro, la mitad del tiempo entre medianoche y las seis de la mañana. En estas horas nocturnas los viajeros se mostraban más laxos, tanto a la hora de quedarse dormidos por el cansancio o el alcohol, como para permitirse muestras de cariño. En palabras del fotógrafo: "Quería captar el estado de ánimo del metro, así que usé luz natural", Con luz natural y disparando a 1/8, se veía obligado a esperar a que el convoy se detuviera para poder hacer las fotografías, con lo que algunas escenas que le habían interesado ya habían desaparecido cuando podía disparar.

Al observar las fotografías una piensa que la cara, la pose y las actividades en el metro no han cambiado en sesenta años, sólo habría que poner unos móviles o unas tabletas en las manos de los viajeros. Las instantáneas muestran a gente durmiendo, leyendo el periódico, haciendo labores, contemplando las musarañas, hablando con compañeros de viaje o flirteando. Kubrick se recreó en las parejas que comparten sueño y cansancio, que hablan con cariño o, como la que abre esta entrada, para ser discretos, se comunican con unos toques entre sus piernas .