domingo, 18 de enero de 2015

Besos en el andén


La pintura y la fotografía de tema ferroviario han reflejado todas las actividades posibles sobre un andén: inauguraciones, llegadas y partidas de dignatarios, despedidas de tropas, regreso de heridos, reencuentros familiares, deportaciones, acogidas o adioses triunfantes a aristas, toreros y deportistas... Cada uno de estos temas da de sí para un completa colección de imágenes, pero empezaremos esta serie sobre escenas de andén con el acto más tierno, erótico y entrañable que en él se ha producido, se produce y se producirá: el beso de los amantes que se despiden o se reencuentran.

El óleo sobre tela que abre esta entrada se titula El beso y fue pintado en 2001 por Emilio Pina, un artista que siempre se ha sentido atraído el tren y su entorno. Este interés por el entorno ferroviario se aprecia en esta tela, tanto en los detalles de la marquesina de la estación como, sobre todo, en las figuras de los dos pasajeros que se despiden o se reencuentran y cuyo beso da calor a toda la escena

Unos años antes, el pintor británico Raymond Leech, al que gusta pintar parejas en distintos entornos y actividades, las había situado en el andén de una estación, despidiéndose ante un convoy a punto de partir o dándose un beso final a través de la ventanilla.



Si retrocedemos un poco más, hasta 1885, encontraremos El beso del italiano Italo Nunes-Vais.


No sólo los grandes pintores trataron el tema del beso en el andén, también lo encontramos en postales populares como estas, que solían venderse en los quioscos de las estaciones:



La fotografía no podía faltar a la cita y, de entre la legión de besos captados en los andenes, por su uso propagandístico, cabe destacar los de los soldados despidiéndose de sus novias.



En la estación de Saint Pancras de Londres hay una escultura de bronce en la cabecera de las vías, obra de 2007 de Paul Day, llamada The meeting Place, que consagra definitivamente la estación como lugar de encuentro con beso de bienvenida. La obra, de nueve metros de altura y veinte toneladas de masa, muestra una pareja en un tierno abrazo. 


Quedan para otra ocasión las escenas cinematográficas con apasionados besos en los andenes, las hay a montones. ¿Cual es tu preferida? Dilo a arteyferrocarril@gmail.com